Defensa personal para primerizos: 5 movimientos que todos deberían saber

1. Golpe con la mano
El primer movimiento de defensa personal que debes aprender es un buen golpe con la mano. Aprende a posicionar las piernas para obtener mayor estabilidad y a lanzar tu brazo para mayor impacto. Esto es un movimiento que seguramente vas a aprender en tu primera clase de defensa personal o de krav maga.
2. Una patada
Ahora que ya aprendiste a estabilizar tus piernas, estarás lista para seguir con las patadas. Este tipo de movimientos es más agresivo y el objetivo es atacar la otra persona lo suficiente como para huir de la situación. En las artes marciales le darías una patada en la ingle al oponente, pero en una situación de defensa personal intenta acertar en el medio de las piernas o en otros puntos sensibles. El judo es una excelente modalidad para entrenarlo.
3. Movimientos de defensa
Pero la defensa personal no se trata solo de atacar. En el caso de que tu atacante intente responder a tus avances antes que huyas, o en el caso de que te ataque con violencia luego al principio, tienes que saber defenderte y a bloquear ataques. El truco es mantener tus brazos a la altura de tus hombros y moverlos de manera a bloquear los ataques y a proteger tu rostro.
4. Resistir desde el suelo
Hay que tener en cuenta que no siempre todo va a pasar exactamente como en las clases de defensa personal. Es posible que caigas al suelo, por ejemplo, y no te de tiempo de atacar con tus brazos y piernas. Sin embargo, esto también lo puedes entrenar en una disciplina como el judo o el karate, en los que tienes que recuperar tu posición desde en suelo muchas veces al largo del combate.
5. Usar lo que tengas a mano
Por supuesto, en una situación de este tipo puedes olvidarte de todos estos movimientos, especialmente si no tienes sangre fría. Me acuerdo que hace unos años le intentaron robar en bolso a una tía, pero ella se hizo valer con lo que tenía. Atacó al delincuente con su bolso, le dio un puñetazo con sus anillos y le dio tiempo de huir, aunque fuera con stilettos por la calle. Por eso, también es una buena idea hacerte más fuerte, entrenar tus movimientos de defensa personal con los accesorios, y intentarlo con el estilo de ropa que sueles llevar por la calle (que seguramente no será un kimono de karate).