¿Por qué es mala la leche de vaca? 3 razones por las que debes dejar la leche
Casi todo el mundo conoce varios beneficios de la leche, como "combatir la osteoporosis". Pero, ¿qué tan saludable es la leche? ¿Realmente necesitamos beber leche? Pues no. Piensa, por ejemplo, que en Asia la mayoría de la población es intolerante a la lactosa o no puede producir lactasa suficiente para digerirla. Países como Japón y Corea no consumen leche, queso y otros productos lácteos, pero aún así tienen las tasas más bajas de osteoporosis del mundo.
Es cierto que la leche es un alimento rico en vitamina B12, calcio y fósforo y que puede resultar nutricionalmente atractivo para quienes carecen de estos nutrientes. Sin embargo, es un alimento de difícil digestión y que, para las personas con deficiencia de lactasa, puede provocar un profundo malestar. Además, existen otras razones por las cuáles debes pensar en dejar la leche.
La leche es un alimento procesado
La calidad de la leche se ve afectada por la alimentación de los animales. Dado que las granjas alimentan las vacas con dietas de dudosa calidad para que crezcan más rápido, terminamos consumiendo hormonas sin darnos cuenta. Por si fuera poco, la leche se procesa mucho hasta que el paquete llega hasta nosotros. A menudo, contiene estabilizantes y conservantes.
La leche es un alimento rico en azúcar.
Si quieres perder peso, la leche no es un buen alimento para ti. Este punto rara vez se menciona, pero la leche tiene un alto valor nutricional. La lactasa es el "azúcar de la leche" y un vaso de leche tiene el equivalente a dos paquetes de azúcar. Además, la leche también es rica en grasas (incluida la leche desnatada), por lo que eleva el colesterol.
La leche está relacionada con tasas más altas de cáncer
Un estudio en Suecia sugiere que las mujeres que beben más leche tienen el doble de probabilidades de desarrollar cáncer de ovario. La leche y el queso también están relacionados con tasas más altas de cáncer de próstata en los hombros.
Si estás pensando en dejar de beber leche, consulta a un nutricionista para buscar sustitutos e ingerir calcio a través de otros alimentos. Por otro lado, si lo que quieres es ingerir proteína para perder peso, busca a un entrenador personal.